La distancia
No es fácil explicar con palabras certeras lo que amamos, y menos aún si está tan próximo que no existe la distancia necesaria para verlo con cierta objetividad. Sólo esa distancia nos permite en ocasiones, comprender la realidad y el verdadero valor de aquello que siempre hemos amado.
Tener conciencia de la realidad supone revisar y validar las alternativas pensadas, asumir la tarea de formar un razonamiento que nos proporcione un amplio panorama de la situación, con el fin de formar el propio criterio, extraer juicios, tener una verdadera libertad de pensamiento, y eso supone ser capaces de adquirir por nosotros mismos esos mensajes concretos de la vida.
La independencia personal es la recuperación plena de la autonomía en el pensar y en el actuar, frente a ello la velocidad con la que transcurre nuestra historia personal podría deshistorizarnos si no se avanza con cohesión, reflexión y autonomía.
Sin un para qué, los cómo y cuando carecen de sentido, hoy ya no basta con vivir, necesitamos CONVIVIR (en la diversidad hallar la complementariedad), encontrar sentido y fundamento a nuestra existencia pues la vida tiene un correlato en la huella dejada en el camino, esa que bien conocemos como trascendencia, no hay sentido en el vivir por vivir o en el vivir por consumir...
Nuestra propia existencia es a veces dubitativa y escéptica, adquiere resonancia en la medida que es capaz de retener, prolongar y transformar el simple vivir, pero también revelar las angustias y los miedos ante un tiempo nuevo frondoso en hallazgos, mutable en sus certezas y misterioso en su inexorable travesía a un futuro previsible e insospechado a la vez
Uno se construye a si mismo en su proyecto personal cuando puede comprender la compleja historia de sus vivir y la puede compartir con otro, cuando ambos se acepten en su manera de ser y de sentir.
Es imprescindible tomar distancia de quienes sólo quieren dominar, obnubilar y represar nuestra capacidad creadora, de quienes impulsan una permanente confusión y buscan hacernos cautivos de su deseos e incertidumbres.